Chilpancingo, Gro. 05 de Octubre del 2016 (IRZA). – Durante los homenajes póstumos que se realizaron por separado a los normalistas Jonathan Morales Fernández y Filemón Tacuba Castro, asesinados en un asalto la tarde del martes en el Libramiento Chilpancingo-Tixtla, sus compañeros exigieron justicia y lanzaron una advertencia: “no queremos impunidad, no lo vamos a permitir, estamos llegando al punto de decir ya basta de resistir, ahora nos tocará actuar”.
Los homenajes que se realizaron en la explanada de esta normal rural se hicieron por separado, debido a los trámites administrativos que hicieron los familiares ante las autoridades ministeriales para reclamar los cuerpos de los dos normalistas.
Primero se ofreció un homenaje privado por parte de la planta docente, estudiantil y de los padres de los 43 normalistas desaparecidos a Jonathan Morales Fernández, originario de la comunidad de Saucitos, municipio de Tecoanapa, en Costa Chica.
El cuerpo del segundo normalista fue reclamado más tarde por sus familiares y los trámites de su entrega duraron más tiempo. La segunda carroza con los restos de Filemón Tacuba Castro, originario de la comunidad de Pantla, municipio de Ayutla de los Libres, llegó a la una de la tarde y se le rindieron los mismos honores.
El dirigente del Comité Estudiantil, Ernesto Guerrero, lamentó que una vez más “la historia de nuestra institución se ha manchado de sangre; el 4 de octubre se anexa a las fechas del 12 de diciembre, del 6 de enero y 27 de septiembre, los dos compañeros regresaban de sus prácticas docentes en la capital, y en esta ola de violencia que vivimos y que el gobierno no ha podido combatir, ahora les tocó a nuestros compañeros.
“Estamos de luto por el asesinato de nuestros dos compañeros de cuarto año, nuestra exigencia es de justicia y que se castigue a los responsables del crimen y de las otras personas asesinadas y lesionadas”, externó.
Afirmó que esos crímenes son “un ejemplo claro de la ola de violencia que se vive a consecuencia de políticos corruptos, de autoridades coludidas con la delincuencia y que fuera de combatirla están en alianza con ellos. No estamos dispuestos a que nos sigan matando, que se quede en la impunidad este y todos los casos de los compañeros asesinados; nuevamente pasa algo trágico en la institución”.
Cuestionó que los “estudiantes, los maestros, los normalistas hacen una manifestación, llegan cientos de policías para contenerla y por eso preguntamos: ¿dónde están esos cientos de policías cuando suceden asesinatos? Porque es más fácil combatir a un estudiante que a un delincuente, asesinaron a unos soldados en Sinaloa y dijeron que van a ir con todo, y en este caso ¿no van a ir con todo porque no eran militares? Tenemos un motivo más para no darnos por vencidos en la búsqueda de nuestros 43 normalistas”.
Señaló que “escuchamos a los políticos que la violencia disminuye, que la estrategia es eficaz y hechos como este demuestran que es ineficaz. Exhortamos a las autoridades a que cumplan con su deber, se esclarezcan los hechos y se lleve a juicio a los responsables; no queremos impunidad, no lo vamos a permitir, estamos llegando al punto de decir ya basta de resistir, ahora nos tocará actuar”.
Por su parte, el señor Melitón Ortega, padre de uno de los 43 normalistas desaparecidos, dijo que en Guerrero “campea la impunidad en el caso de los 43 y ahora que estén atacando a los estudiantes es grave, es preocupante, vivimos en un estado que se dice democrático y hay impunidad. Denunciamos estos hechos y acusamos al Estado de permitir la delincuencia. Rechazamos esa agresión que consideramos que es una embestida contra la normal rural”.
