Chilpancingo, Gro. 09 de Noviembre del 2017. – El especialista en estructuras, Roberto Arroyo Matus, determinó que el edificio del Jardín de Niños “Juan N. Álvarez”, ubicado en la calle Baltasar R. Leyva Mancilla, en el primer cuadro de esta capital, no tiene afectaciones estructurales, hecho por el que los maestros ya pueden impartir clases a sus alumnos.
“Pude apreciar en la construcción que no hay afectaciones graves, porque las fisuras que se observaron no representan ningún peligro”, dijo el ingeniero Arroyo Matus.
El catedrático de la escuela de ingeniería de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), después de una visita de inspección insistió en que las afectaciones, entre leves y moderadas, obedecen a que en la edificación de ese edificio “hubo un proceso constructivo inapropiado”.
En esa institución educativa, la planta docente suspendió labores desde el 19 de septiembre pasado, dejando sin clases a al menos 300 niños, con el argumento de que el edificio estaba afectado estructuralmente.
Sin embargo, Arroyo Matus este jueves en una visita de inspección precisó que en general ese tipo de infraestructura educativa “es mucho más segura”, son muy resistentes, inclusive ante los temblores de tierra.
Pero dijo que cuando se comenten errores en el proceso constructivo se pueden generar problemas en ese tipo de infraestructura, uno de ellos es que colocaron “muros divisorios entra aula y aula, de manera inapropiada en la edificación.
Externó que el constructor original levantó los muros fuera del eje de columnas y eso con él sismo de 7.1 de septiembre pasado género algunos problemas de deformación en las losas y en los propios muros, que con un sismo muy intenso pudieran ocasionar una especie de “vaivén”.
Especificó que de acuerdo a las revisiones que ha realizado en algunos edificios escolares en la zona Centro, sólo existen daños moderados, leves y en algunos casos asociados más a procesos constructivos.
Y agregó que en la zona Norte se hará una demolición de al menos 130 aulas chicas, de un sólo nivel, de tipo rural.
Asentó que a comparación a las afectaciones estructurales que sufrieron los inmuebles escolares en la zona Norte, el nivel de afectaciones en Chilpancingo fue muy bajo.
