*Señalaron que esa actitud de omisión, de cerrazón y de insensibilidad del presidente y de los magistrados y consejeros de la Judicatura que lo apoyan en sus decisiones abona a la ingobernabilidad
Chilpancingo, Gro. 16 de Mazo del 2017. – Guerrero registra un grave rezago en la aplicación de justicia, debido al nepotismo, la falta de carrera judicial, material para elaborar documentos, política laboral, pero ante todo en transparencia en el manejo de los recursos, fomentadas por el Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Guerrero, Robespierre Robles Hurtado, quien argumenta que no se han cumplido los compromisos con los trabajadores por decisiones del gobernador Héctor Astudillo Flores.
Así lo denunció en conferencia de prensa – afuera de los juzgados civiles de Caleta- el secretario general de Prestadores Públicos del Poder Judicial del estado de Guerrero, Adalberto Valenzo Martínez, quien añadió que con el arribo de Robespierre Robles Hurtado, a la presidencia del TSJ, se lograrían cambios sustantivos en materia laboral que permitieran mejorar la aplicación de la justicia, que ya se habían firmado con ex presidentes.
Aseguró que es falso que se hayan cumplido los acuerdos plasmados en las minutas, que se firmaron desde el 2015, de acuerdo al pliego petitorio, mismo que conocía Robles Hurtado, antes que fuera nombrado magistrado presidente del TSJ, ya que se reunió con los trabajadores y se le hizo entrega del pliego.
Hoy desconoce los acuerdos del pliego petitorio, y continúa con las viejas prácticas que han hundido al TSJ, argumentando que no son de su tiempo y además no cuenta con los recursos económicos suficientes para satisfacer los caprichos de los trabajadores.
Valenzo Martínez, aseveró que Robles Hurtado, se ha negado a poner en práctica la carrera judicial, bajo el argumento de que son instrucción del gobernador Héctor Astudillo Flores, quien además es que el “recomienda” los nombramientos de las nuevas bases a discriminación que se han dado”.
“Nosotros no creemos que sean instrucciones del gobernador, ya que el TSJ es autónomo y cuenta con 50 millones de pesos como presupuesto, mismo que administra Robespierre Robles, junto con sus allegados, los cuales se encargan de “negociar” las plazas a recomendación de magistrados y familiares.
El líder sindical acuso de perverso al magistrado presidente Robles Hurtado, ya que para evitar que avance la aplicación de la justicia en Guerrero, llevando a cabo el cumplimiento de los compromisos con los trabajadores llevando a cabo la carrera judicial; convocar a concursos para nombramiento de las nuevas plazas y el escalafón para ascenso de los empleados administrativos y trasparentar el manejo de los recursos. Ha filtrado a través de sus cercanos que vamos a tomar las instalaciones del TSJ.
En el TSJ laboran un promedio de mil 500 trabajadores que son afectados en sus aspiraciones a crecer laboralmente, debido a los caprichos de Robles Hurtado, quien se niega rotundamente a sacar adelante la aplicación de la justicia en Guerrero, todo por complacer a sus amigos, compadres y familiares. Saliéndose del esquema nacional donde hay estados que han avanzado enormemente con la puesta en marcha de la carrera judicial.
El dirigente manifestó que las demandas de los trabajadores son justas y están apegadas a derecho y denunciaron que el magistrado presidente Robespierre Robles se ha negado a dialogar y se mantiene en la cerrazón ante las demandas de los trabajadores.
Afirma Adalberto Valenzo, que el funcionario ha demostrado su incapacidad para solucionar el conflicto, pues desde que llegó al TSJ los trabajadores han estado llamando al diálogo para que se resuelvan sus demandas de aumento salarial de 35 por ciento y diversas prestaciones laborales.
Señalaron que esa actitud de omisión, de cerrazón y de insensibilidad del presidente y de los magistrados y consejeros de la Judicatura que lo apoyan en sus decisiones abona a la ingobernabilidad.
Finalmente demandó la intervención del Congreso local para que ordene una auditoría al Fondo Auxiliar para la Administración de Justicia de Guerrero, y transparentar su uso, así como para saber en qué y cómo han gastado el dinero los funcionarios del TSJ.
